21 enero 2013

Debajo de la piel.

Planeamos el encuentro... Cuando llegaron las 10 de la noche y el viento comenzaba a agitar las hojas de los arboles. Su auto llego por mi, mi corazón se detuvo por un instante, pero al verlo con su sonrisa tan reluciente, salí en busca de el, subí y solo atine a darle un beso en la mejilla, con los ojos algo caídos, el me sonrió y aceleramos.
Durante el camino solo hubo una conversación que intercambio frases del estilo " como estuvo tu día  o "como me sentí el día de hoy" , el resto fue un silencio un tanto incomodo, el solo manejaba, y yo, tan insignificante como una hormiga, miraba por la ventana y tarareaba las canciones que sonaban... Cada tanto, me daba cuenta de que el me observaba, pero al devolverle la mirada, el corría la suya, y sonreía.
Llegamos al sitio, me ordeno entrar mientras el buscaba algo en su auto, y yo obedecí.
El lugar estaba algo oscuro, solo dos luces verdes lo iluminaban.. y sonaba "donde estas corazón  de Enrique Iglesias. el aroma era agradable, y estaba calentito.
El entro rompiendo mi concentración y me abrazo por detrás, me dio un beso en el cuello y se saco el abrigo. Esa situación me dejo paralizada dos segundos, luego procedí a sacarme mi saco, colocandolo en el mismo perchero que el.
Se sentó de otro lado de la cama, dejo su celular y su billetera, se saco las zapatillas y la remera, se acostó y  al cabo de un ratito me dijo:
- ¿Te vas a quedar ahí parada o necesitas invitación? A lo que yo respondí: - Tengo mis tiempos.
Debo reconocer que eso me molesto un poco, pero hice silencio... Me saque mi calzado y me acosté a su lado.
Intercambiamos un par de risas misteriosas y un poco incomodas y comenzó a besarme.
Era dulce, me agarraba de la cara y sus labios se entrelazaban con los míos . Yo era feliz. Sentía que era lo único que necesitaba, me llenaba el alma. Estuvimos besándonos largo rato y comenzaron las caricias..
No hace falta aclarar lo que iba sucediendo.. La imaginación es mucho mas poderosa.. Solo voy a agregar que me sentía plena, mi corazón latía con fuerza y al sentir su respiración y los latidos de su corazón era la mujer mas feliz, se me erizaba la piel.. El era todo lo que me hacia bien. Era una mezcla de dulzura y misterio que no dejaba de sorprenderme.
Aun recuerdo cada una de las canciones que iban sonando, como el sonreía para mi y como yo me sentía completamente suya, recuerdo como me sentía cuidada y por sobre todo, querida.
No se cuando tiempo estuvimos allí, solo se escuchaba la lluvia, que hacia tiempo se oía caer.. El dormía mientras yo lo observaba y me llenaba de paz. Su teléfono sonó un par de veces, y entre tanto el se despertaba, me daba un beso cariñoso, me agarraba entre sus brazos y volvía a dormirse, hasta que el sueño se apodero de mi....
Podría haber permanecido así durante días..afuera, la noche fría y la lluvia, adentro sus brazos cálidos y sus besos que no dejaban de hacerme vibrar.. No podía pretender algo mejor.
El tiempo paso sin darnos cuenta... Me despertó suavemente, y me dijo que era hora de volver a casa..
Mis pocas ganas eran mas que obvias, y comencé a vestirme pausadamente, mientras que el ya estaba listo. Entre besos y abrazos tiernos termine de alistarme y comenzamos la vuelta..
Ahora el sostenía mi mano mientras manejaba y no dejaba de observarme, me sentía sumamente incomoda, pero mi corazón latía tan fuerte que no pude decirle nada..
La charla ahora fue mucho mejor, escuchaba atento mis bobadas, se reía,  me contaba anécdotas que se desprendían de mis relatos y todo parecía ser perfecto.
Me dejo en la esquina de mi casa, nos dimos un beso prolongado, nos deseamos las buenas noches, me sonrió , si, siempre sonreía, como si nada mas pasara a su alrededor....  y se fue..
Mi corazón irradiaba felicidad, el reloj marcaba las 2:15 de la mañana, me acosté pensando en todo lo que ocurrió y no puede evitar sentirme bien.